Como bien sabéis en las orquestas siempre hay una persona la cual se coloca frente al resto de integrantes y empieza a mover los brazos de un lado hacia otro. Muchos pensareis que su labor no es del todo importante, pero si continuáis leyendo comprobareis que se trata de todo lo contrario.
Esa persona es el Director de Orquesta o también llamada Maestro, este es la figura de referencia de los demás que conforman las orquesta, incluso el coro. Su tarea no es fácil, pues consiste en conseguir la coordinación de los músicos, indicando, las diferentes entradas de los instrumentos, la dinámica, etc.
Pero esto no es todo, y es que una de sus funciones fundamentales es la de conseguir de la orquesta lo mejor de ellos mismos para conseguir transpasárselo al público. Por ellos, los estudios de música, tanto técnicas de dirección como habilidades de poco sirve si no posee la cualidad esencial de motivación.
El Director de Orquesta surgió debido a la imposibilidad de armonizar los diferentes instrumentistas cuando las agrupaciones instrumentales fueron creciendo en número. Los primeros directores se limitaban a marcar la pulsación dando golpes con la mano sobre el facistol. Con el tiempo lo hicieron golpeando con con un bastón sobre el suelo, pero al ser molestos se consideró el enrrollar una hoja de papel y mediante balanceos se marcaba el tiempo. Más tarde, fue sustituido por los brazos del director y para su mayor visibilidad se apoyaban alargando los brazos con una batuta.
Las técnicas gestuales son los movimientos que hacen para indicar a la orquesta cómo tocar más allá de la partitura. En esta técnica los protagonistas son los brazos:
En primer lugar además de los brazos se le da gran importancia a la captación visual, el Director al salir de forma decidida debe conseguir captar la atención de todos los músicos y prepararse para la posición inicial.
La importancia de la posición corporal y la relajación, la forma de las manos, cómo empuñar la batuta, cómo adecuar el gesto de la dirección al físico del director son clave para su buena ejecución.
Los directores suelen utilizar una batuta para prolongar visualmente la mano derecha.
Una vez esto, alzará los brazos y a bajarlos hasta el punto de inicio, marcando así un pulso.
¿QUIERES SER DIRECTOR DE ORQUESTA? PUES PRUEBA TÚ MISMO, PRACTICA LA
TÉCNICA UTILIZADA Y DIRIGE A TUS AMIGOS
¿cómo? Indica mediante los gestos cuando es su entrada
¿qué tienen que hacer¿ seguir el ritmo que llevas mediante palmadas coordinadas. Si lo haces bien el resultado es la armonía total.
Este ejercicio lo hemos practicado en el aula de música y puede resultar muy divertido, os lo recomiendo.
Si en este momento no tienes a alguien con quién practicar, puedes poner una orquesta conocida en la tele de tu casa y quitar todo el volumen, ahora TÚ seras quién les vaya guiando.
Aquí tenéis un vídeo de un gran director de orquesta: